Al presentar un balance de las acciones que ha encabezado la administración federal para atender a las víctimas de la explosión del viernes pasado en un ducto de combustible en Tlahuelilpan, Hidalgo, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que la tragedia pudo evitarse si no hubiera exitido corrupción, y reiteró que no habrá tregua en la estrategia contra el robo de hidrocarburo (huachicoleo). Durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario dio a conocer que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) presentó una queja “acusando al Ejército Mexicano por inacción” antes del estallido. Sin abundar en los argumentos que expuso el órgano defensor de las garantías individuales, adelantó: “claro que se va a responder, pero así están las cosas. Se les va a entregar toda la información el día de hoy”. El Presidente destinó más de una hora con 40 minutos a hablar casi exclusivamente de las labores de atención a los heridos en Hidalgo. En la conferencia, el secretario de Salud federal, Jorge Alcocer, dio a conocer que hasta la mañana de ayer la cantidad de víctimas fatales ascendía a 89, al tiempo que 51 personas aún eran atendidas en hospitales del país, algunas en condiciones graves. Sin embargo, en el transcurso del día las cifras se colocaron en 91 y 49, respectivamente. López Obrador reiteró que el principal objetivo del gobierno federal es salvar vidas y atender las causas de que creciera el delito del robo de hidrocarburos. Este delito, apuntó el jefe del Ejecutivo federal, es una de las consecuencias que tuvo la política económica neoliberal en el país, la cual desató también la violencia y la pobreza a causa de “abandonar el bienestar” de la población y dejar de apoyar las actividades productivas en la República Mexicana. –¿La tragedia pudo evitarse? –Claro que se pudo evitar la tragedia, si no hubiese corrupción en México, si no se llevara a cabo esta práctica de robo de combustible, si la autoridad no lo permitiera, si la gente por necesidad no llevara a cabo estas actividades; claro. Siempre he dicho que es mejor prevenir que lamentar. Y para prevenir se deben atender las causas que llevan muchos años sin hacerlo. “No vamos a permitir la corrupción. Tenemos muy claro el diagnóstico. Todas estas tragedias se originan por la corrupción y hay que atender las causas y nos va a alcanzar el tiempo. Dicen que vamos muy aprisa, es que así lo exigen las circunstancias. Si no actuamos y seguimos tolerando estas prácticas por comodidad o por complicidad, o por negligencia o por lo que sea, entonces nunca va a cambiar el país”, agregó. Sin embargo, recalcó que “limpiar (de corrupción) va a llevar algún tiempo. No es que de la noche a la mañana, aunque claro que hemos avanzado en muy poco tiempo”. En seguida, el director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, al ser cuestionado durante la conferencia de prensa sobre las investigaciones y la posibilidad de complicidad de personal de la empresa para permitir la fuga en el ducto en Tlahuelilpan, indicó: “no me atrevería ni a negarlo ni a afirmarlo”, ya que por el momento no cuenta con datos sólidos que puedan apuntar a ello. Recordó que la Fiscalía General de la República realiza las indagatorias sobre la responsabilidad en el caso y determinará si hubo complicidad que derivó en la explosión. Por su parte, el secretario de Salud federal indicó que “el compromiso es seguir dando la mejor atención, indudablemente de un nivel que no podemos dejar hacia abajo. Desde nuestro punto de vista, todavía tienen algunos de los heridos posibilidades de salvar su vida, lo cual es, desde luego, nuestra primera y única encomienda”.
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